No es una diferencia técnica, es una diferencia real
Prestar servicios de soporte técnico va más allá de contar con los conocimientos técnicos necesarios: también hay que estar ahí para los clientes cuando más te necesitan. Solucionar problemas de forma rápida y eficaz demostrando que son lo primero para tu marca. Cuando las cosas se tuercen, demostrar cuánto te preocupas por ellos es la clave para que se conviertan en embajadores de la marca a largo plazo.

Conocimientos técnicos
Soporte de nivel uno y de nivel dos basado en experiencia intersectorial.

Centrados en los clientes
Conversaciones con los clientes basadas en la conexión emocional.

Mejora continua
Conseguida gracias a 8 millones de conexiones diarias con los clientes.
Soporte técnico con un toque humano
Si tu empresa se toma en serio fidelizar a los clientes y convertirlos en embajadores de marca, sabrás que el punto de compra no es el final del viaje; de hecho, ahí es justo donde empieza… Por eso, además de ser expertos certificados, nuestros empleados también cuentan con las habilidades interpersonales y la formación necesaria para prestar servicios de soporte técnico en línea con las expectativas del cliente.
Esta combinación de capacidades y atención a la CX es lo que garantiza que encajen a la perfección en tu empresa (ya sea B2B o B2C), reflejando tu cultura y apoyando a tus equipos existentes.
El objetivo de cualquier servicio de cara al público (sobre todo de soporte técnico) debería ser la mejora continua, ya que los problemas de IT tienden a generar especial frustración a los clientes, especialmente cuando el servicio en cuestión genera interrupciones en su vida cotidiana.
Con nuestro modelo Sitel Tech Support as a Service™, tenemos un enfoque de colaboración personalizada con un soporte superior, una rentable solución de soporte técnico para soluciones de Atención al Usuario, Soporte técnico especializado y Soporte técnico de pago.
Ayúdanos a ayudarte
Agrupamos nuestros recursos, las lecciones aprendidas y las nuevas experiencias vividas con toda nuestra cartera de clientes en una única base de conocimientos de buenas prácticas para mejorar el servicio continuamente. La monitorización de indicadores de llamada frecuentes nos permite identificar qué problemas recurrentes pueden solucionarse mediante el autoservicio o la automatización. Ayudar a los clientes a ayudarse a sí mismos deja a nuestros equipos más tiempo para dedicar sus conocimientos a manejar las interacciones de mayor valor, lo cual da lugar a una mayor fidelización y a que estos se conviertan en embajadores de marca.